A LOS MILITANTES DE ACCIÓN NACIONAL EN COAHUILA:

En relación con las elecciones del pasado 6 de junio, los consejeros estatales del Partido Acción Nacional que suscribimos, exponemos lo siguiente:

1. Antecedentes, 2020:

En octubre del año pasado, el Partido Acción Nacional sufrió en Coahuila una tremenda derrota electoral: Al más puro estilo de los viejos tiempos, el priismo del estado se llevó en 2020 “carro completo”. Por amplísimo margen, como no se veía desde hace medio siglo, el PRI arrolló en los comicios para diputados locales en los 16 distritos electorales.

El PAN, el año pasado, no alcanzó a obtener en Coahuila un porcentaje de la votación estatal equivalente a dos dígitos. Apenas cubrió la tercera parte de las casillas electorales con representantes ante las mismas. Vio disminuido su grupo parlamentario local de nueve a tres diputados. De ser el segundo partido con la mayor votación obtenida a lo largo de décadas, y aun el primer lugar en un par de elecciones federales, pasó a ocupar el tercer sitio, y en un buen número de municipios incluso el cuarto y hasta el quinto lugar.

A pesar de la estrepitosa debacle registrada en 2020, la dirigencia estatal del partido permaneció impasible. Y cerrada. Como si absolutamente nada grave hubiera ocurrido. Continuó con su actitud de no escuchar las voces críticas que al interior se manifiestan, de marginar a militantes valiosos sólo por expresar sus desacuerdos, de continuar con la práctica de designar candidatos con criterios de grupo y docilidad a la dirigencia, y no en razón de su capacidad, preparación, trayectoria personal y auténtica lealtad a Acción Nacional. Ahora se ven las consecuencias.

Después de la catástrofe de octubre del año pasado, una dirigencia estatal con al menos una pizca de dignidad y de ética, habría seguido cualquiera de los dos caminos siguientes: 1. Renunciar con decoro, ó 2. Convocar con humildad y apertura a todos los militantes y dirigentes del partido en Coahuila a un ejercicio de análisis amplio, informado, crítico y reconociendo errores, con el propósito de discutir, trazar y poner en ejecución, con la participación de todos, un programa de acción pertinente y viable para reposicionar y fortalecer al partido en el estado. Nada de esto sucedió. Y no sólo eso sino que continuaron las prácticas de cerrazón, intolerancia, marginación e intransigencia que tanto han dañado a Acción Nacional en Coahuila.

2. La realidad, 2021

Las cifras de las elecciones del pasado domingo 6 de junio indican, infortunadamente, que en Coahuila Acción Nacional volvió a obtener resultados francamente raquíticos, magros, que ni remotamente corresponden al esfuerzo histórico que el PAN ha desarrollado en Coahuila a lo largo de más de ocho décadas.

Carece de sentido hacer el recuento del nuevo desastre electoral, toda vez que por lo reciente del mismo todos conocen sus dimensiones. Apenas cuatro mayorías en la elección de ayuntamientos y de éstos en el municipio de mayor relevancia (Monclova), por escasa diferencia

3. Las causas

Si no se han corregido las causas que en los últimos años han provocado la caída de Acción Nacional en la simpatía y preferencia del electorado coahuilense, es perfectamente explicable que la debacle continúe. No podría ser de otra manera.

Así, los ciudadanos del estado han percibido, no han visto bien y de hecho reprueban:

• La actitud obsequiosa y complaciente de la dirigencia estatal con el gobernador y sus funcionarios, todo parece indicar que a cambio de favores.
• La extraña conducta de algunos dirigentes, al andar exhibiéndose como
• escuderos del gobernador.
• La ausencia de crítica vigorosa, contundente y sistemática a la errática y
• paupérrima acción del gobierno estatal.
• Las oscuras negociaciones para la designación de hasta cuatro magistrados
• judiciales a propuesta de la dirigencia estatal, entre amigos y favoritos que ni
• remotamente cumplen el perfil para serlo.
• La postulación de candidatos de Acción Nacional por el método de
• designación, no de elección democrática interna, sin ajustarse en numerosos casos al criterio ético de seleccionar a los mejores militantes por su preparación, capacidad, trayectoria, experiencia y fidelidad al partido (que no es lo mismo que incondicionalidad a los dirigentes, y menos cuando éstos actúan mal), designaciones que hacen recaer en amigos, socios y favoritos, para garantizar la permanencia de los grupos dirigentes, estatal y de no pocos de los comités municipales.

Por otro lado, como es natural, lo que externamente no se conoce, al menos en detalle, es la desorganización interna del Partido en Coahuila, la desatención a los comités municipales, la indolencia de la dirigencia, en especial del presidente, que se supone de tiempo completo; la ausencia de vida institucional, de cursos, conferencia y seminarios como fue durante décadas la tradición de Acción Nacional; mantenimiento de un padrón interno altamente cuestionado, por su saturación de falsos militantes (por cierto, perversa alteración que iniciaron dos personajes de Torreón, ambos curiosamente hoy diputados federales de otro partido); por la notoria indiferencia en la solución de conflictos internos, y un largo etcétera que sólo procede desahogar internamente.

4. CONCLUSIONES:

1.- A la luz de las anteriores consideraciones, por dignidad la dirigencia estatal debe renunciar.

Ahora bien, estando próxima (entre julio y diciembre del presente año) la renovación del Comité Directivo Estatal de Coahuila, de acuerdo a lo dispuesto por los artículos 43 numeral 3 y 7° Transitorio de los Estatutos Generales de Acción Nacional, a fin de evitarle contratiempos dañinos al partido se propone sólo la renuncia del presidente, conforme al procedimiento previsto por el artículo 68, numeral 1 inciso b), de los propios Estatutos; así como la convocatoria a sesión extraordinaria del Consejo Estatal, para que delibere sobre la situación del partido en Coahuila y tome las medidas conducentes y viables a fin de proveer su cabal reorganización.

2.-  Como militantes de Acción Nacional convocamos a todos los coahuilenses de buena voluntad y que compartan los principios y valores del Partido, en particular a los jóvenes, a prepararse con nuestro apoyo para unirse al PAN y fortalecer su lucha, de acuerdo a lo señalado por el fundador, Manuel Gómez Morin, quien desde la misma asamblea constitutiva del Partido, en septiembre de 1939, marcó el rumbo: “Aquí nadie viene a triunfar ni a obtener; sólo un objetivo ha de guiarnos: el de acertar en la definición de lo que sea mejor para México”.

Programaremos al efecto las actividades necesarias, que previamente anunciaremos.

Saltillo, Coah., a 14 de junio de 2021.

Ana Elizabeth Flores Rocha

Ariel Venegas Castillo
Eva Flores Rocha
Iván Chávez Lastra

José Roberto de Luna Alons

Juan Antonio García Villa

María Eugenia Cázares Martínez

María Teresa Romo Castillón

Michel Ramos Martínez
Pedro Ávila Aguilera

Sara Sofía Burciaga Dávila