Recuperación asistida de petróleo es una opción viable

Adncoahuila

“La recuperación asistida de petróleo es la tercera etapa en los métodos o procesos que se utilizan para su extracción. 

La publicación de noticias que anunciaban que se estaba declinando la producción de barriles de petróleo en México y que no se tenían suficientes recursos para hacer explotación de nuevos yacimientos, motivó al Dr. Enrique Javier Jiménez Regalado, investigador del Centro de Investigación en Química Aplicada a indagar si la técnica que él estudiaba en ese momento podría ayudar a recuperar petróleo.

“La recuperación asistida de petróleo es la tercera etapa en los métodos o procesos que se utilizan para su extracción.  En una primera etapa, el petróleo sale del pozo debido a la presión que tiene.  Cuando ya no hay más presión y deja de salir el petróleo, se empieza una segunda etapa que consiste en bombear agua o inyectar gases como oxígeno o nitrógeno para continuar con la producción. Cuando ya ninguno de estos métodos son efectivos, se continua con la tercera etapa que consiste en utilizar químicos como son surfactantes y lo que está de moda, polímeros hidrosolubles asociativos, los cuales son disueltos en agua.” Así lo informó el doctor Jiménez Regalado cuyo tema de estudio ha sido este tipo de polímeros pero con enfoque en pinturas y recubrimientos.

“Revisando la literatura, descubrimos que en la tercera etapa de la recuperación del petróleo hay un gran potencial, ya que se reporta que los pozos cuentan aún con alrededor de entre el 40 y 50 porciento de petróleo que se queda atrapado después de las primeras dos etapas. Pensamos que eso puede ser algo importante.  Sin embargo, el uso de químicos aumenta los costos con respecto a las primeras etapas”.

Es por ello que el investigador junto al catedrático Claude St. Thomas, se han dado a la tarea de preparar diferentes polímeros hidrosolubles asociativos con los cuales se pretende reducir los gastos de operación de esta tercera etapa de recuperación de petróleo.

“Sabemos que esa técnica la están aplicando ya en el Instituto Petrolero de China y reportan que holandeses también aplican este método para la extracción de gas shale en Arabia Saudita.  También hay otros métodos, pero esta es nuestra propuesta” apuntó.

Claude St. Thomas, investigador asociado, refiere que la base del funcionamiento de los polímeros que han desarrollado, incluyen “materiales con cierta abundancia, que son solubles en agua, y cuando se mezclan, dependiendo de su estructura química o física, cambian sus propiedades.  Esto les da cierta viscosidad, como un gel.  Creemos que una parte de ese gel se va a pegar al petróleo y la otra al agua; cuando se bombee hará un tipo de red que entrará al petróleo y ayudará a empujarlo hacia el exterior. Este gel puede ser modificado dependiendo de la característica de cada pozo, lo que derivará en el costo final y la calidad de petróleo recuperado”.

 Los principales retos que enfrentan los investigadores en estos momentos es que, aunque tienen desarrollado el material gracias al financiamiento de CONACYT en proyectos de ciencia básica, no han hecho pruebas aún en pozos petroleros funcionales.

“Lo que nosotros tratamos de hacer en cuanto a investigación; es que con los polímeros hidrosolubles asociativos que estamos desarrollando, se puedan implementar en  esos yacimientos petroleros considerados agotados y se puedan reactivar mediante la técnica terciaria de recuperación. Para después poder poner a disposición de quien así lo requiera, el conocimiento necesario para la producción a gran escala de dichos polímeros para utilizarlos con este fin.  Con la expectativa de que sea más barato con iguales o mejores resultados en la extracción terciaria de petróleo”  finalizó Jiménez Regalado.