Napistas se apoderan de pueblo en Coahuila y expulsan a habitantes

Adncoahuila

La mayoría de las familias ha abandonado la comunidad de Hércules. Desecha la Fiscalía del Estado denuncias por violencia y otros delitos

Hércules, Sierra Mojada, Coah., INFONOR.- Esposas de trabajadores expulsados de la localidad por activistas afines al senador Napoleón Gómez Urrutia, fueron informadas por personal de la Fiscalía General del Estado de Coahuila (FGE) que se desecharon las denuncias presentadas ante los delitos cometidos por el grupo que mantienen bloqueada la localidad y amedrantada a la población.

Los representantes de la FGE aconsejaron a las mujeres, que permanecían refugiadas junto a sus familias en un hotel fuera del pueblo, retirarse de la zona para evitar posibles enfrentamientos con los piquetes que por turnos controlan la única entrada y establecen ilegales retenes en la terracería que une a Hércules con la ciudad de Camargo, Chihuahua.

Han causado terror en la comunidad y la mayoría de las familias han preferido abandonarla, dejando sus casas y sus cosas, igual que los directivos de la empresa que ya ni se aparecen, por lo que Hércules parece pueblo fantasma; las madres que se quedaron no dejan salir a sus hijos por el mismo temor”, señaló Rolando Torres, cabeza del Sindicato Minero Democrático, legalmente representante de los trabajadores.

Identificó como principal responsable de la violencia a Francisco Vaca Pavia, proveniente de la localidad de Camargo, “quien desde hace muchos años no es trabajador minero pero está a sueldo del sindicato de Napoleón y coordina a los agresores, les lleva provisiones y hasta alcohol”.

“Es gente muy agresiva, han golpeado a compañeros y amenazado a nuestras esposas, hemos denunciado muchas veces que recorren el pueblo armado con bates, machetes y armas cortas, amenazando a quienes permanecen, pero ninguna autoridad ha hecho nada, los policías locales están igual de asustados, no intervienen y los napistas se sienten respaldados por el gobierno de Coahuila y ahora más con esto de que decidieron no atender las demandas”, agregó.

Torres refirió que antes veían con sorpresa las noticias de pueblos controlados por delincuentes en otros estados del país, “pero ahora lo vivimos en carne propia y con estos porros impunes aquí entendemos por qué aparecen los grupos de autodefensa para proteger a la población”.

Una madre de familia, esposa de un empleado de la Unidad Hércules de Minera del Norte y maestra en una de las escuelas locales (pidió reserva de su nombre), indicó que ha permanecido en el poblado por obligación laboral, en tanto su marido busca trabajo en el vecino estado de Chihuahua.

“Para nosotros la situación es muy grave, a mi esposo no le pagan desde hace tres meses y encima vivimos sin él, atemorizados por esta gente. Pensamos que cuando vinieron las autoridades pondrían orden, pero resultó al revés, vinieron a legalizar el desorden”, expresó e informó que finalizaron el año escolar con prácticamente la mitad de los alumnos regulares en todos los niveles.

“Ya ni queremos solicitar apoyo de las autoridades, porque el alcalde se hace el loco, no quiere entrarle al problema, y cuando vinieron los de Saltillo nos salió peor, quedamos más mal de como estábamos”, se quejó.

Entrevistado telefónicamente, el ingeniero Raúl Domingo Ramírez, subdirector de operaciones de Minera del Norte, cabeza de la Unidad Hércules, reconoció que ante la situación la mayoría del personal de jefaturas se retiró de la comunidad y cuando es necesario labora a distancia y no han percibido remuneración por más de tres meses.

Dijo desconocer el estado en que se encuentra la mina subterránea, principal fuente de suministro de fierro para las siderúrgicas de AHMSA en Monclova. “La misma gente se tomó hace meses la bocamina, impiden el acceso de los técnicos, cortaron el suministro de electricidad, se han robado equipos y partes. Suponemos que hay daños que costará mucho reparar, porque al no bombear se inundó con vehículos, maquinaria y equipo de trabajo en el interior”, precisó.