Siguen los esfuerzos para salvar a Notre Dame

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Un daño significativo al techo de la catedral,, ha dejado su interior abierto a los elementos climatológicos, además del impacto producido por los trabajos realizados para controlar el incendio.

extraNEWS 13 07 2019.- Casi tres meses después de que un incendio destruyera la catedral de Notre-Dame en París, el arquitecto jefe del edificio advirte que todavía existe el riesgo de que los arcos del techo del edificio histórico aún se derrumben, causando graves daños estructurales.

“El riesgo es que todas las bóvedas caigan allí. Es así de simple «, dice Philippe Villeneuve, arquitecto jefe de Notre-Dame, «Por el momento no lo sabemos porque nadie ha ido a verlos, porque no puedes ir a verlos».

El hombre responsable de supervisar la reconstrucción de Notre-Dame dice que los riesgos de un colapso catastrófico son pequeños, pero que la verdadera extensión del daño no se conocerá hasta al menos el fin de año. Hasta entonces, seguirá siendo un sitio de valoración.

Aquellos que evalúan los daños de Notre-Dame están trabajando en un plazo muy ajustado: el presidente Emmanuel Macron ha declarado que el edificio debe ser reconstruido dentro de cinco años. Pero Villeneuve dice que aún quedan algunas incógnitas profundamente preocupantes sobre en qué estado se encuentra Notre-Dame, especialmente porque el interior del edificio ahora está abierto a los elementos. «No sabemos si hay fisuras o fracturas», dice.

La escena sobre el edificio de casi 900 años de antigüedad es desalentadora. El marco del techo ahora es solo una maraña gigante de plomo fundido, retorcido y doblado como espagueti en el fuego. El techo en sí mismo es un agujero abierto sin nada entre él y la nave a 226 pies por debajo. Las láminas de plástico y la red cubren partes del agujero, mientras que otras partes permanecen expuestas a la lluvia y las altas temperaturas que Francia ha experimentado en las últimas semanas.

Por ahora, se considera demasiado arriesgado para que los humanos trabajen dentro de la catedral, ya que cualquier manipulación o presión fuerte podría causar un daño mayor. Es por eso que los arquitectos e ingenieros aún no han podido examinar el daño en detalle. Pero Villeneuve dice que los sensores instalados el día después del incendio no han podido detectar ningún movimiento estructural que pueda indicar un colapso inminente. =Ǵ��n��_s��